Ya llegaba casi de noche a mi departamento, entre, tiré las llaves en la mesa, abría las cortinas de par en par en mi ventana y me deje caer en el sillón, era un anochecer tranquilo no había sabido nada de Michael pero no me preocupaba, mañana compraría el boleto a Las Vegas estaba muy cerca de los Ángeles en avión alrededor de una hora.
Así recostada pensaba en los momentos que había pasado con él, dibujaba una sonrisa en mis labios mientras me quitaba la liga del cabello. Cenaba algo para dormir temprano ese día.
¿Les ha pasado que uno empieza haciendo planes al empezar el día cada hora y hasta cada minuto como si tuviéramos el control de que todo lo que vamos a realizar al final resultara tal y como quisiéramos?, eso pensaba pero nada me podía haber preparado para lo que el día me deparaba antes de 24 hrs.
7:00 am Me levanté feliz teniendo en mente lo que iba a suceder, lo primero que hice fue comprar el boleto del avión por teléfono, aparte un vuelo a las seis de la tarde programe el día mentalmente, iría a dejar mi columna al correo, me pasaría a la fundación, para regresar nuevamente al departamento, cambiarme y salir hacia al aeropuerto, llegaría a Las Vegas vería a Michael y pasaríamos una noche inolvidable.
8:09 am: me dirijo al correo a dejar mi columna, avente el sobre al buzón y me dirigí a la fundación.
8:45 am: aunque había tráfico llegaba lista para empezar solo debía alistar algunas cosas.
9:02 am: empiezo platicas con papás de nuevo ingreso acerca de orientación y apoyo hacia sus hijos con enfermedades terminales, tratando de contestar cada una de las preguntas y también de lo que la fundación ofrece.
12:07 pm: termino la plática para dirigirme a la cafetería era hora de mi descanso Rosie y Alex me daban la nueva y buena noticia de que ya eran novios también les comente de la visita sorpresa que iba a hacer a Las Vegas festejamos con jugo, fruta y pan con mermelada, que era nuestro refrigerio.
12:45 pm: terminando el refrigerio, me dirigí hacia el salón de juegos y recreación donde se encontraban niños con sus papás, nos dedicábamos a enseñarles a los padres los mejores métodos para pasar tiempo de calidad con sus hijos, en estos momentos que más los necesitan. Y también para que puedan estar enfocados en los difíciles tiempos venideros. Sabían que contaban
con nuestro apoyo.
2:00 pm: nos dirigimos a una junta con el supervisor, hablábamos de mejora en las estrategias de la fundación.
3:00 pm: terminada la junta, pido permiso de irme temprano ese día.
3:51 pm: Entró a mi departamento a cambiarme, arreglarme y salir.
5:37 pm: Llego al aeropuerto, con buen tiempo todavía.
“Pasajeros del vuelo 228 con destino a Las Vegas, favor de abordar”, ese era mi vuelo.
6:02 pm: El avión comienza a despegar.
6:53 pm: aterrizaba en el aeropuerto McCarran de Las Vegas, con toda la emoción.
7:42 pm: Tuve algo de problemas para encontrar un taxi desocupado, no esperaba el tiempo de ver a Michael nuevamente,afortunadamente sabía en qué hotel se encontraba.
8:40 al bajar del taxi, vi una señora vendiendo flores, así que no lo pensé y compre un ramo con las más bonitas y frescas para él.
Entre al hotel, pero quería ver a alguien conocido y rogaba por que Michael se encontrara en el hotel en ese momento. Al primero que vi desafortunadamente fue a Sal que al verme corrió escaleras arriba. Después vi a Frank Dileo con su puro en la mano como siempre. Me asombro que me saludara.
-Elizabeth, ¿vienes a visitar a Michael?
-Hola Frank, si es mi intención, ¿crees que pueda?
-Claro que si, le dará gusto verte, ven acompáñame les diré a los guardias del piso que te dejen subir, está en la habitación 1182.
Frank me llevó unos pisos arriba, solo aviso a los primeros guardias que iba a subir y entre ellos se comunicaban por walkie-talkies, Frank me dejo porque tenía cosas que hacer, yo seguí subiendo más pisos por el elevador, al llegar me sentí nerviosa, ya sabía a cual restaurant invitarlo a cenar.
Me lo imaginaba a él abriendo la puerta, con esa hermosa sonrisa y yo de un salto lo abrazaba como nunca y pasar una memorable velada a su lado,iba pensando todo esto cuando salí del elevador, llegué frente a la puerta y toque, tardó un poco en abrir, pero al abrirse no fue lo que esperaba.
Joanna abría la puerta con solamente una toalla cubriéndola y el cabello mojado,me encontraba completamente pasmada y mi corazón empezaba a dar saltos frenéticos en mi pecho.
-Ah! Hola Elizabeth. - me decía despectivamente. Te dije que Michael y yo nos amábamos. Y acabamos de salir de bañarnos.
Me quedé un momento muda
No te creo Joanna.-le contesté con mirada desafiante.
-¿No me crees? ¿Por qué no pasas y lo averiguas? no te detengo si quieres entrar.
¿Joanna me dejaba entrar libremente? me lo decía con tanta seguridad que en ese momento dude de mí, metí un poco la cabeza al cuarto, estaban todas las cosas de Michael y fue cuando salió una mucama con platos de la comida.
-¿Srta. Joanna? me acaba de decir el Sr. Jackson que la espera en la recamara.-le decía la mucama mientras se marchaba.
Joanna empezaba a reírse, parecía estremecerse el suelo bajo mis pies, ¿Por qué no me dijo la verdad?, si él quería estar con Joanna lo hubiera entendido, ¿pero así? ¿Por qué?, deje caer el ramo de flores, no lo podía soportar y empecé a alejarme rumbo al elevador, este estaba tardando demasiado en subir, así que mejor gire y corrí hacía las escaleras, tratando de alejarme de él y de todo, mi cara estaba empapada en lágrimas, tenía que irme.
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