Los nudillos de Janet golpeteaban la
puerta desesperadamente, por lo que lograron levantarme.
-¡Vamos! Que es importante
que vean esto. Seguía sin cesar.
Salí de la
cama perezosamente, me puse una bata y dando unos pasos torpes abrí la puerta, bostezando y
restregando mis ojos con las manos.
Si bien me encontré de
frente a ella, cuando me tomó del brazo, y de un jalón me llevó corriendo tras ella hasta la sala.
Michael aún no salía del
cuarto.
-Mira esto. Prendió la
televisión.
Yo me senté lentamente en
el sillón con las manos sobre mis rodillas, entrecerre los ojos,
tratando de entender que quería mostrarme.
De pronto mis ojos se
abrieron de par en par, como enormes platos.
Volteé a ver a Janet, y de
nuevo a la televisión.
Un programa de noticiero
hablaban no solo de Michael, sino de mí, también Pero ¿Cómo?
El sueño que aún sentía se
cortó de inmediato.
En un canal periodístico una reportera de mal
aspecto hablaba lo siguiente:
Esta mañana el periodico
“The fake” publicó que Michael Jackson y la señorita Elizabeth Porter se acaban
de comprometer en matrimonio, celebrándose anoche en una reunión íntima con amigos cercanos en
Neverland, no hay más noticias al respecto pero les estaremos informando de los
acontecimientos, y seguiremos esta boda a detalle.
-¡¿Qué?!.-Un grito por encima de cabeza se dejo asomar, Michael estaba
detrás de mí, azorado completamente. -¿Pero, cómo, quién?, Esto no puede ser, ¿Quién
dio la noticia? Debió haber sido algún trabajador de Neverland.
Con una mano en su cabeza y
la otra en la cintura, comenzó a dar vueltas por el pasillo, hablando para sí mismo.
Lo vi caminar, de un lado, mirando como trataba de sacar conjeturas a lo que nos estaba mediando en ese momento.
Lo vi caminar, de un lado, mirando como trataba de sacar conjeturas a lo que nos estaba mediando en ese momento.
-¡Michael!. Me paré y alzé la voz, sacándolo
de su monólogo, se detuvo y me miró, me quedé en shock, no sabía que más decirle estaba tan impactada como él.
Nuestras miradas se detuvieron.
Nuestras miradas se detuvieron.
Así
quietos sin quitarnos la vista uno del otro, desvariamos en nuestros pensamientos, pasivos, quietos, sin movernos, como si fueramos un par de maniquíes más adornando Neverland.
Nos miramos, perdidos en un abismo de confusión, buscando una respuesta en algún rincón de nuestras pupilas.
De pronto Michael dio una fuerte palmada y una sonora carcajada.
Janet y yo saltamos del susto.
-¿Qué se te ocurre?. Lo miro Janet largamente.
Michael me miró, se mordia el labio inferior.
Él tenía una idea, conocía ese brillo en su mirada.
-¡Vámonos Elizabeth! Nos
iremos de aquí, nadie tiene que enterarse donde nos vamos a casar, nos casaremos esta misma noche, se el lugar perfecto donde no nos molestarán, nadie pensará que hoy mismo nos casaremos.
Su idea me encantaba, fugarnos al más heróico capitulo de alguna historia de aventuras y era el mejor modo de sacarle la vuelta a los periódistas.
Ya no me extrañaba este ajetreo, estaba acostumbrada a movernos de este modo cuando era necesario.
Janet nos despidió en la puerta y nos deseo lo mejor del mundo.
Ella sabía lo mucho que habíamos esperado para este momento y era el adecuado.
París estaba a un pestañeo de mi fantasía, ese mágico lugar que había llegado a visitar en mis sueños, nunca pensaría que ahí pudiera casarme algún día.
El destino era experto en entretejer nuestros caminos, uno realmente no sabe lo que puede llegar a ocurrir en la vida.
Hace un par de años no me hubiera imaginado nada de esto.
Esto de viajar ya se me había hecho costumbre, pero cada viaje seguía siendo igual de asombroso para mí, con Michael todo podía pasar.
En el avión, lo vi dormitar un rato, me paré para caminar un poco por el pasillo del avión, vi a Bill Bray sentado, me acerque lentamente por detras para sorprenderlo, pero me di cuenta que estaba hablando por teléfono con Gail su esposa.
Aburrida, camine de nuevo a mi asiento, vi que la chaqueta de Michael se había caído y un papel había salido de ahí.
Lo levante para meterlo nuevamente y de reojo mire unos garabatos, unos dibujos, y un par de palabras llamaron mi atención: "History tour".
¿Ira a salir de gira Michael nuevamente? es normal para el disco que esta promocionando, tal vez acababan de decirle, y estara esperando el momento oportuno para platicarlo conmigo,de nuevo en mi asiento sin poder dormir, pensaba en un millón de cosas, como que él ansiaba tener un hijo y no podía darselo eso me entristecía, pensaba en nuestra boda, en todo lo que estaba por ocurrir en ese día.
La emoción me invadía.
De pronto estabamos ahí, en ese lugar de ensueño,y esa misma noche celebraríamos nuestro matrimonio en secreto, hubiera querido que todos nuestros seres queridos estuvieran presentes, pero no era posible, tal vez de regreso haríamos una fiesta en honor a nuestra unión.
Había mucho que hacer, y aún queríamos dar una vuelta por la ciudad antes de la noche.
Apurados nos dirigimos al hotel, queríamos ir a todos los lugares turísticos mas importantes.
En el hotel nos quedamos en el penthouse mas elegante con una vista asombrosa, Michael se disfrazaba para poder salir, mientras tanto daba una mirada hacia el magnifico lugar por el enorme ventanal.
Algo llamo mi atención, alguien salía y se escondía detrás de un árbol.
¿Podría ser que fuera...?
-Linda, ya estoy listo, salgamos.
Era único, el maestro del disfraz sin duda.
-Espera un momento, deja ir por mi chamarra. De dos saltos la tomé sobre una silla y en otros tres saltos ya estaba tomando su mano.
-Tengo algo que decirte Elizabeth.
Presentí que sería lo de la gira.
Esboce una tenue sonrisa, le bese la nariz.
-Si, hablaremos en la tarde. Sonreí
Antes de irnos, corrí a cerrar las cortinas, las había dejado abiertas, di otro vistazo hacia afuera y ahí seguía esa persona.
Y ya no tuve dudas.
¿Porqué nos siguió Debbie Rowe hasta aquí?
Su idea me encantaba, fugarnos al más heróico capitulo de alguna historia de aventuras y era el mejor modo de sacarle la vuelta a los periódistas.
Ya no me extrañaba este ajetreo, estaba acostumbrada a movernos de este modo cuando era necesario.
Janet nos despidió en la puerta y nos deseo lo mejor del mundo.
Ella sabía lo mucho que habíamos esperado para este momento y era el adecuado.
París estaba a un pestañeo de mi fantasía, ese mágico lugar que había llegado a visitar en mis sueños, nunca pensaría que ahí pudiera casarme algún día.
El destino era experto en entretejer nuestros caminos, uno realmente no sabe lo que puede llegar a ocurrir en la vida.
Hace un par de años no me hubiera imaginado nada de esto.
Esto de viajar ya se me había hecho costumbre, pero cada viaje seguía siendo igual de asombroso para mí, con Michael todo podía pasar.
En el avión, lo vi dormitar un rato, me paré para caminar un poco por el pasillo del avión, vi a Bill Bray sentado, me acerque lentamente por detras para sorprenderlo, pero me di cuenta que estaba hablando por teléfono con Gail su esposa.
Aburrida, camine de nuevo a mi asiento, vi que la chaqueta de Michael se había caído y un papel había salido de ahí.
Lo levante para meterlo nuevamente y de reojo mire unos garabatos, unos dibujos, y un par de palabras llamaron mi atención: "History tour".
¿Ira a salir de gira Michael nuevamente? es normal para el disco que esta promocionando, tal vez acababan de decirle, y estara esperando el momento oportuno para platicarlo conmigo,de nuevo en mi asiento sin poder dormir, pensaba en un millón de cosas, como que él ansiaba tener un hijo y no podía darselo eso me entristecía, pensaba en nuestra boda, en todo lo que estaba por ocurrir en ese día.
La emoción me invadía.
De pronto estabamos ahí, en ese lugar de ensueño,y esa misma noche celebraríamos nuestro matrimonio en secreto, hubiera querido que todos nuestros seres queridos estuvieran presentes, pero no era posible, tal vez de regreso haríamos una fiesta en honor a nuestra unión.
Había mucho que hacer, y aún queríamos dar una vuelta por la ciudad antes de la noche.
Apurados nos dirigimos al hotel, queríamos ir a todos los lugares turísticos mas importantes.
En el hotel nos quedamos en el penthouse mas elegante con una vista asombrosa, Michael se disfrazaba para poder salir, mientras tanto daba una mirada hacia el magnifico lugar por el enorme ventanal.
Algo llamo mi atención, alguien salía y se escondía detrás de un árbol.
¿Podría ser que fuera...?
-Linda, ya estoy listo, salgamos.
Era único, el maestro del disfraz sin duda.
-Espera un momento, deja ir por mi chamarra. De dos saltos la tomé sobre una silla y en otros tres saltos ya estaba tomando su mano.
-Tengo algo que decirte Elizabeth.
Presentí que sería lo de la gira.
Esboce una tenue sonrisa, le bese la nariz.
-Si, hablaremos en la tarde. Sonreí
Antes de irnos, corrí a cerrar las cortinas, las había dejado abiertas, di otro vistazo hacia afuera y ahí seguía esa persona.
Y ya no tuve dudas.
¿Porqué nos siguió Debbie Rowe hasta aquí?
2 COMENTARIOS:
¿Qué pasará? Me muero de curiosidad!!!
Por favor síguela pronto Liz!!! No nos dejes intrigadas por mucho tiempo.
¡Un beso!
Anita
Por favor continua! me encanto este capitulo! lleno de intriga... jeje de nuevo aqui me tendras esperando cada capitulo(: espero el siguiente.
saludos
Sabrina
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