CAP. 2

Y aquí estoy rumbo a Los Angeles, y no me arrepiento de haber tomado esta decisión, me hacía falta conocer un mundo totalmente nuevo, me gusta conocer, si de verdad me siento feliz.

Algo especial me va a ocurrir, lo sé y bueno apenas se inicia el año de 1992, era muy pequeña cuando me subí a un avión así que es como subir de nuevo por primera vez, que nervios!!..

Al llegar a la ciudad no me puedo creer lo inmensa que es, mira esos edificios, estoy tan extasiada, no podía dejar de ver sacando mi cabeza por la ventana del taxi.. al llegar a nuestro destino me topo con una linda niña:

- Hola, ¿de dónde vienes?

-De la India es mi primera vez en esta ciudad, ¿tu vives por aquí?

 -Si, aquí cerca, oye me gusta tu pulsera es tan bonita con tantos colores...

- Gracias me la regalo un niño en la India, a mi me gusta también la tuya, esta negra que tienes aquí..

-Si me la compro mi mamá porque es igualita a la que usa madona

-¿Madona?, ¿ quien es madona?

-jajaja que simpática eres, bueno me voy, es hora de comer.. adiós.

De verdad no sabía quién era madona en fin, descargamos maletas y las dejamos en nuestro nuevo hogar, una pequeña casa con todo lo necesario.. y por supuesto que mañana iré a buscar trabajo.. ya ves no me gusta estar mucho tiempo sin hacer nada jeje..

Al día siguiente:.. fui entregando algunos curriculums en escuelas, al llegar a una vi a un niño con un gorrito tan bonito y lo salude, sus papás me platicaron que estaba ya muy enfermito y no podía seguir en la escuela, y lo estaban llevando a la fundación llamada make a wish.. me interesó tanto que pregunte por ese lugar y me dijeron que se dedicaban a concederles deseos a los niños que tenían enfermedades terminales...Que bonito objetivo tiene esa fundación me dije por lo que voltee y les dije:

-Gracias por la información y en donde queda?-.

Me hicieron un mapa y salí rumbo para ese lugar,
Si, eso era lo que quería hacer, iba a ir a este lugar y pediría trabajo ahí, me encantan los niños y me gustaría apoyarlos y hacerlos felices, no? ¿que más que eso?

Al llegar me dijeron que no había lugar para que me pudieran pagar, pero podía entrar como voluntaria..

-Claro que sí, eso deseo-. Les mencione convencida.

Al empezar a trabajar conocí a dos bueno amigos a Alex y a Rosie, todo los días en la fundación llegaba con muchas ganas y alegría, me encantaba contarles historias a los niños y también apoyaba a los papás con platicas acerca del mejor modo de ayudar a los niños, solían llevar muy seguido a los niños de viaje. Un día un niño me regalo un dibujo que el hizo, era una persona con un saco negro brillante, un sombrero negro tipo como los gangster, tenia mucha fuerza el dibujo y aunque no se le veia el rostro en el dibujo me había encantado, le dije gracias lo abracé y me guarde el dibujo. Un día que ya me iba del trabajo mi supervisor me dijo que mañana era especial y quería a todos los voluntarios..

-¿De veras? pues si quieres a todos los voluntarios debe ser un lugar especial

-si, cada determinado tiempo nos toca llevarlos ahí, y a los niños y a nosotros nos encanta ir, hay juegos, dulces, películas, un zoológico, los niños se la pasan bien

-Mañana muy temprano aquí me tienes-. Cuando estaba a punto de retirarme, alcance a preguntarle

-Oye!!! pero ¿cómo se llama el lugar?

-¡ NEVERLAND RANCH! no se te olvide aquí temprano, hasta mañana!!!

¿ Neverland Ranch? me gusta el nombre, de repente se me vino a la mente un dueño ya mayor con barba muy bueno tal vez dueño de algún negocio petrolero, no lo sé, mañana le preguntare a alex y a rosie por él o por ella tal vez sea mujer la dueña pero esta persona hace una gran labor y ojala lo conozca o a ella para darle las gracias por lo contentos que hace a los niños, se nota que tiene un alma muy bondadosa, bien aquí estaré mañana, me dije mientras me dirigía a la salida..